Un área de gran preocupación para los empleadores son los gastos de los accidentes. Mucha gente no se da cuenta de cuánto cuestan los accidentes. De hecho, muchos gastos no siempre son obvios.
El prestar atención al control sobre las pérdidas puede mejorar el éxito de una compañía.
¿De dónde viene el dinero para pagar por los resultados do un accidente? Algunas personas creen que hay una organización de donde viene el dinero para pagar los gastos de los accidentes. Sin embargo, los empleados saben que el dinero tiene que venir de las ganancias de la compañía. Una serie de accidentes caros puede reducir las ganancias seriamente. Los accidentes tienen gastos obvios y directos como los gastos médicos, de hospital, y gastos de rehabilitación, pagos al fondo de compensación de trabajadores, y mensualidades altas de seguro o hasta una pérdida de los derechos de seguro. Los accidentes tienen gastos menos indirectos, que usualmente no son asegurados. Éstos
incluyen los trastornos normales de trabajo, como cuando un empleado detiene su trabajo para ayudar a un empleado lesionado, o una falta de producción que puede resultar en una entrega tardía de productos. Si las ganancias no bastan para cubrir los gastos, la compañía podría tener que diferir la adquisición de equipo y facultades.
A menudo, la gente trata de minimizar los gastos de accidentes al decir que están cubiertos por el seguro. Sin embargo, el seguro cubre solamente una porción de todos los gastos. También, cuando los gastos del accidente suben, suben las primas o mensualidades del seguro. Es claro que los accidentes reducen las ganancias directa e indirectamente.
Por ejemplo, un empleado recibe una descarga de electricidad de un equipo con falla y se lesiona seriamente. Muchas personas en el departamento dejan de trabajar. Algunos corren para dar los primeros auxilios al lesionado, mientras otros van por ayuda. Cuando llega la ayuda para el lesionado, ¿regresan todos los empleados a trabajar? No siempre. Podrían seguir ayudando o podrían quedarse a observar. En esta situación, todo el tiempo en que los empleados no están trabajando se incluye en los gastos del accidente.
Tan pronto como el lesionado recibe su tratamiento médico, su próxima tarea es investigar el accidente. Todo el tiempo relacionado con la investigación del accidente y los sueldos pagados a los testigos se incluyen en los gastos totales del accidente.
Si la persona lesionada pierde trabajo por un corto tiempo, podría compensar esta falta al poner a los demás a trabajar horas extras. Los sueldos de tiempo extra pagados a los empleados se incluyen en los gastos totales del accidente. Si el lesionado está incapacitado para trabajar por meses, tendría que contratar y capacitar a un trabajador para reemplazar al lesionado, sabiendo que podría ser menos eficaz. Si una máquina se daña en el accidente y el trabajo tiene que ser hecho con una máquina menos eficaz, su éxito bajará aún más. Toda esta eficacia reducida representa otro gasto indirecto.
Los gastos indirectos de un accidente usualmente son más que los gastos directos. Un estimado conservativo es que por cada dólar de los gastos directos de un accidente, hay tres dólares de gastos indirectos. Algunos estudios muestran que los gastos indirectos pueden ser de hasta cuatro a diez veces más que los gastos obvios.
Algunos gastos indirectos a considerar incluyen:
• Tiempo que el lesionado pierde del trabajo.
• La pérdida de ganancias.
• Pérdidas económicas de la familia del lesionado.
• Tiempo perdido por otros empleados.
• Pérdida de eficacia debido a la falta de un grupo completo.
• Pérdida de tiempo debido a supervisión.
• Los gastos por capacitar a un trabajador nuevo.
• Daño a las herramientas y el equipo.
• Equipo dañado por el tiempo desperdiciado.
• Trabajo defectuoso.
• Pérdida de producción.
• Daño – fuego, agua, químicos, explosivos, etc.
• Fallas en el lleno de pedidos.
• Gastos cuando el trabajo fue interrumpido.
Como hay muchos gastos imprevistos debido a los accidentes, hay también ahorros escondidos en la prevención de los mismos. Por esta razón, la frase ‘control sobre las pérdidas’ se usa muy a menudo en la administración de la seguridad. Cada accidente que se previene ahorra gastos directos e indirectos – dinero que permanece en sus ganancias. Otros beneficios de la prevención de accidentes incluyen:
• Sus empleados no serán lesionados o privados de la vida.
• La propiedad y materiales no serán dañados.
• La producción se moverá más eficazmente.
• Tendrá más tiempo para las tareas de administración de su trabajo.
Tal como un iceberg, los gastos indirectos de los accidentes no son visibles en la superficie, sino que están escondidos. Ejemplos de tales gastos:
• Pérdida de producción
• Gastos de capacitación para el trabajador de reemplazo.
• Pérdida de capacidades y eficacia
• Papelería
• Tiempo administrativo
• Pérdida de actitud
• Asuntos legales
• Gastos médicos
• Ganancias
• Equipo
• Compensación del Trabajador
Recursos
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(385) 351-8511
(800) 446-2667 ext 8511
ADVERTENCIA: Es posible que esta guía se refiera a las regulaciones de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA); sin embargo, esta no es la guía legal de OSHA u otras leyes de seguridad, códigos o regulaciones. El observar las leyes de OSHA, otras leyes, códigos, o regulaciones de seguridad, y el mantener un ambiente seguro de trabajo para sus empleados, es responsabilidad del empleador. WCF no toma sobre sí el deber de ningún empleador de proveer para la salud o seguridad de sus empleados. WCF no le garantiza que su lugar de trabajo sea seguro, ni que cumpla con ningunas leyes, regulaciones, códigos o normas.